Ceremonias Secretas: La Masonería Inglesa se Abre a la Población
La masonería inglesa está llevando a cabo una serie de jornadas de puertas abiertas para responder a las preguntas de la población sobre la naturaleza y el funcionamiento de esta organización.
De esta manera, quieren combatir el hermetismo con el que tradicionalmente se ha asociado a los masones.
Según Peter, un joven masón de Londres, sus compañeros de trabajo saben que él es miembro de una logia y nunca se ha encontrado con ningún hermano masón que se niegue a dar a conocer su membresía o esconda lo que hacen.
Cada logia se reúne cuatro veces al año oficialmente en las ceremonias de recepción a los nuevos masones, que pueden durar una hora. Lo que ocurre en ellas ha sido siempre un secreto bien guardado.
En la ceremonia, los nuevos masones deben responder a una serie de preguntas.
Lo que se dice en la reunión nunca se transcribe. Los miembros se les disuade de hablar de política o religión, pero la creencia en un poder superior ha sido, históricamente, un requisito para unirse.
Se estima que hay alrededor de seis millones de masones en todo el mundo.
Se reúnen en un templo al que llaman logia, ya que es donde los antiguos canteros se encontraban mientras trabajaban en una iglesia o catedral.
Usan delantales o mandiles masónicos, que se remontan a la teoría de que la masonería evolucionó a partir de los canteros que los usaban para protegerse durante el corte de las piedras.
El "tercer grado" es la etapa final antes de convertirse en masón de pleno derecho. La ceremonia implica un exhaustivo interrogatorio, que es de donde procede la expresión "someter a alguien al tercer grado".
Entre los masones reconocidos se encuentran el ex primer ministro británico Winston Churchill o los escritores Arthur Conan Doyle, Rudyard Kipling y Oscar Wilde.
La masonería segrega a hombres y mujeres en distintas logias. La primera logia femenina en Inglaterra se creó en 1908, y su primer venerable maestro fue un varón.
Después, el 100% de sus componentes fueron mujeres y se vetó la participación de hombres. Según una masona británica entrevistada por la BBC, las actividades realizadas por hombres y mujeres son las mismas.
