My Fraternity
6 de dez de 20222 min
(Cultura masónica)
Las tres obras capitales de Guénon, de un total muy importante de escritos, serían, según sus críticos, “El hombre y su devenir según el Vedanta”, “Simbolismo de la Cruz”, “Oriente y Occidente” y “Los estados múltiples del ser”.
Sin duda, René Guénon estuvo afiliado a la Logia Thebah, de la Gran Logia de Francia, hacia 1910, asistiendo a sus tenidas hasta 1912 (según datos constatados).
Lo cierto es que Guénon tuvo, desde su juventud veinteañera, la convicción de la existencia de una “verdad metafísica” subyacente, común a todas las grandes tradiciones espiritualistas y conservada íntegramente en las culturas orientales.
Por ello, decidió continuar su labor (que él consideraba “misionera”) en Egipto, convertido al islam y declarando (en 1930) que allí se encontraba “más en su casa que en Europa”…
Según lo expresara en sus propias revistas VERS LA TRADITION y LA GNOSE, la Masonería está “eclatée”(=fragmentada o expandida) en las diversas Obediencias y los diversos Ritos…
Sin embargo, todo ello podría incluírse en un esencial “Rito Masónico”, expresión del un ORDEN UNIVERSAL cósmico, en el que las diferencias se absorberían en la Unidad originaria de los distintos Grados y los diferentes Ritos, sean cuales sean las características específicas de estos.
Por lo demás, la fórmula masónica “REUNIR LO DISPERSO" no se referiría nunca a una simple suma de partes, sino a una síntesis de la que esas partes emanan, expresadas cada una de un modo.
Con todo el respeto que merecen las convicciones sinceras y quienes buscan honradamente “verdades”, creo que el motivo impulsor de la masonería “occidental”, surgida en la Inglaterra de 1717, tras siglos de disputas bélico-religiosas en toda Europa, fue la posibilidad de lograr la PAZ SOCIAL a través de la FRATERNIDAD, apoyando la libertad de pensamiento y la tolerancia constructiva.
No me parece adecuado considerar ejemplar ni esencialmente masónico el pensamiento metafísico “guenoniano”…